El Colloto B conoció este sábado la dureza de esta categoría. El hecho de ser juveniles de primer año comienza a notarse en los jugadores.
El partido pintaba mal, Molina tuvo que ser el portero, y Pepín tuvo que ser la pareja de Carlos Barri en la defensa. El partido comenzó bien. El Lugones apenas veía puerta mientras que en el 35' Josué provocaba un penalty que Barri convertía en gol, era el 1-0 para los verdes.
Con este resultado se fue al descanso, pero la segunda parte fue un verdadero desastre. El equipo se desmoronó desde el minuto 1' cuando llegó el empate de los visitantes. A raíz de ahí el Colloto bajó los brazos y acabó encajando 6.
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